Alegoría de los mundos 3
Constantemente trenza su tela la araña
empresa sin par, encaje a la perfección
en el desocupado rompecabezas del aire.
De las alturas provienen cálidas las gotas
lágrimas de un dios sensitivo y sensible
procreación humanizada del destierro
riente mutación de agua bendita y autora
de rastros, especulaciones y simientes.
Suspenden entre cielo y tierra los hilos
entramado de representaciones y tendencias
poliédricas volutas impresionadas en un mar
glauco y atrevido, un mar colmado de perlas
esféricas, rutilantes, espejadas y límpidas.
Germen húmedo, emergido semen del alma
entre las riberas clandestinas del espacio
donde los pensamientos, inocentes, aglutinan
entelequias y vacilaciones con los que erigir
los perplejos fundamentos del hombre.
© José Luis
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