A por ellos
Todos con un ansia en el alma
somos porteadores de la bandera,
de los colores de nuestra selección,
del peso de un balón que se manda
a las mallas del recuerdo
donde las glorias persisten
como legendarios e inaccesibles dioses
que anudan a los mortales a las botas
del fracaso o del triunfo.
Todos empujamos las voces de la noche
más allá de las gargantas y del silencio
donde presentimos reflejada en la hierba
la luna y los jugadores que recorren sus rayos
como estelas de honor y vértigo
en los que sucumben los cánticos de la grada
ante la conquista de la oquedad prohibida,
hierática circunscripción de Cancerbero.
Todos nos aunamos en el grito “a por ellos”
y detenemos el tiempo ante el televisor
con los brazos levantados,
con las caras pintadas,
con el gol en la palabra reprimida
o el júbilo suspendido en la balaustrada
movediza del Olimpo
donde aguarda la copa de la verdad
o de la cumplida historia.
A por ellos…
que son la distancia
que nos separa de la gloria.
© José Luis
2 comentarios
marcos -
Un abrazo.
marcos -
antes de que el bochorno
me aletargue,
contemplo unos puntos suspensivos,
imagino cosas, lo que vendrá después...