Tus amapolas
La rojez de tus mejillas
en la orilla de los sueños
se espeja en la amapola
surgida de la tierra.
Suena el aire
y la mañana se despereza
con la música de tu nombre
que retumba en mis recuerdos
de un día caluroso de junio
en el Guggenheim de los tiempos.
La araña poseyó las voces
matizadas del encuentro,
se hilvanan las figuras a sus patas
asidas con firmeza por el niño
que te mira y abraza,
alguna vez entronado,
desde la madurez de su alma.
Siempre serán mis amapolas
brazos de esperanza,
ojo de fuego
en la inmensidad
de una mirada…
© José Luis
2 comentarios
José Luis -
Es insospechado el valor de los vínculos entre las personas...
Besos
ojodefuego -
Gracias y un abrazo.