Salto a la sombra
En el aire has dejado la gravedad de tu cuerpo
y la sombra con el suelo se aviene en el lance
mientras congelado tu movimiento se suspende
el torso desnudo en la piel y en el tiempo.
El granito espera en las ruedas un roce
que encadene de nuevo figura con su silueta
y revierta en sonido en solo un momento
el trueno caído en la espesura de una tormenta.
La tarde se viene poco a poco en las nubes
y el cielo suelta monopatines de plata
donde entonan los ladrillos de una vieja iglesia
la equilibrada ceremonia de sangre y liturgia.
© José Luis
4 comentarios
José Luis -
pero sí en mi corazón...
marcos -
José Luis -
nereidas danzan en mis sueños
y el polvo de las estrellas
me trae del espacio recuerdos...
marcos -
tu imaginación no tiene límites, amigo.
un abrazo