Olvido de sí
Un vaso con agua encima de la mesa,
entre los dientes el frío inerte de la noche
cuando la soledad marca las tres de la mañana
y la cama es un cajetín vacío de polvo agolpado.
La vida perdía por las venas el tiempo
de la juventud y el pozo de las lágrimas
era un cenagal de fuego negro y moribundo
que retorcía sus llamas en la boca del silencio.
Hubo un jardín donde los recuerdos paseaba
las tardes de lluvia bajo el paraguas abierto
donde desplegaba a sus hijos en los juegos
bulliciosos por la casa, ahora vacía y desterrada.
Pocas son las cosas que retiene su cabeza
que sólo se ilumina por un sonido perdido
o una imagen descosida en la pantalla
como una sonrisa cercana y borrosa en el aire.
© José Luis
2 comentarios
José Luis -
Dulces sueños
;-)
gobina -
Buenas noches...
:-)